Foros Toreros

Una feria triunfal de público, y en el plano artístico solo unas pocas gotas

La Feria de San Isidro 2024 en Madrid ha sido un éxito rotundo en términos de asistencia, con 564.353 espectadores. Con una media diaria de 20.902 asistentes y 13 llenos completos, la feria ha superado las expectativas de afluencia.

A nivel artístico, el balance ha sido mixto. Borja Jiménez destacó como el único matador en abrir la Puerta Grande, acompañado por Jarocho, Diego Ventura y Guillermo Hermoso de Mendoza en otras ocasiones. En la corrida de Beneficencia, Fernando Adrián también salió a hombros.

El peso medio de los toros fue de 566 kg y las novilladas 502 kg, con un total de 165 reses lidiadas. Sin embargo, figuras como Roca Rey, Morante y Manzanares no lograron brillar, y solo se cortaron 19 orejas durante todo el evento.

La feria ha sido una prueba del rejuvenecimiento de la afición taurina, destacando la resistencia de la tauromaquia ante las críticas. A pesar del éxito de público, la falta de actuaciones destacadas de las principales figuras dejó un sabor agridulce en el plano artístico.

Impresionante la afluencia de público, la Feria de San Isidro sigue demostrando su importancia en el calendario taurino. Sin embargo, esperaba más de las grandes figuras.

Lo primero es el arte. Y los empresarios deberían presentar las causas del fracaso artístico en primer lugar. Ganar mucho dinero está muy bien, siempre que eso no te lleve al cementerio.

Estos son los triunfadores, que hay que ponerlos, y felicitar a cada uno de ellos. Año muy difícil para los diestros, y para los ganaderos.

- mejor novillero: Jarocho.

- mejor rejoneador: Diego Ventura.

- torero revelación: David Galván.

- mejor estocada: Isaac Fonseca.

- mejor picador: Alberto Sandoval.

- mejor brega con el capote: Raúl Ruiz.

- mejor banderillero: Juan Carlos Rey.

- mejor toro: ‘Dulce’, de Victoriano del Río.

- mejor ganadería: Fuente Ymbro.

El éxito de público es innegable, pero la falta de triunfos importantes refleja un problema en la calidad de los toros. Necesitamos más toros bravos y menos espectáculo vacío.

El fallo de las ganaderías ha sido común, casi cada día todos imposibles por falta de fuerza o mansedumbre, sin casta, sin bravura... ¿qué hacen los veedores de toros?

San Isidro ha sido una feria de contrastes, con una afluencia increíble, pero artísticamente algo floja. Borja Jiménez ha salvado el honor de los matadores.

Los datos de asistencia son impresionantes, pero el balance artístico deja que desear. Esperaba más de Roca Rey y Morante. Necesitamos una renovación en el ruedo.

La asistencia ha sido un éxito rotundo, pero la falta de emoción en el ruedo es preocupante. Las figuras no han estado a la altura.

Al paso. Primero público. Luego aficionados. A los que pique el gusanillo y quieran saber más, encontrarán fascinante la tauromaquia. A los del yintoni, que lo paguen caro.