Bruno Aloi, de México, se lleva el trofeo, Pedro Luis, Perú, el respeto. El Mene, España: bien
Publicado: Vie Jul 25, 2025 11:25 am
Bruno Aloi, de México, se lleva el trofeo, Pedro Luis, Perú, el respeto. El Mene, España: bien
La final del certamen de novilladas nocturnas Cénate Las Ventas dejó una clara disyuntiva entre el nombre del ganador oficial y el reconocimiento popular. El mexicano Bruno Aloi fue proclamado triunfador al cortar la única oreja de la noche ante el cuarto novillo, el más completo del serio encierro de Guadaira. Su actitud resolutiva, temple ante el viento y una estocada efectiva le valieron el premio. Sin embargo, desde los tendidos no faltaron protestas a la concesión y a la manera de lograrla, que algunos consideraron más efectista que profunda.
Frente a él, el peruano Pedro Luis se ganó el respeto y la ovación de la afición con una actuación entregada y muy torera. A pesar de sufrir un susto tremendo al recibir al sexto novillo de rodillas, se repuso y construyó una faena de muletazos hondos, ceñidos y con aroma clásico, que solo el mal manejo de la espada impidió que se coronara con oreja. Fue el torero que más convenció a los aficionados exigentes, aunque el jurado lo dejó sin premio.
El Mene, que tuvo una buena actuación ante el segundo, mostró gusto y personalidad, especialmente al natural y en doblones. La petición de oreja fue desatendida por la presidencia. En su segundo turno, con un novillo manso y descastado, apenas pudo mostrar nada. Pese a su esfuerzo, quedó en tercer plano ante el contraste entre la entrega de Pedro Luis y el triunfo numérico de Aloi.
El encierro de Guadaira fue duro y desigual. De seria presentación, algunos utreros parecían toros por cuajo y defensas.
Tras la proclamación oficial de Bruno Aloi como ganador (anunciada primero en redes y más tarde por megafonía), la empresa Plaza 1 optó por incluir a los tres novilleros en la próxima Feria de Otoño como reconocimiento a su esfuerzo. Una decisión que, aunque no zanja del todo la polémica, equilibra la balanza de méritos y visibilidad en una final que deja más debate que certezas.
La final del certamen de novilladas nocturnas Cénate Las Ventas dejó una clara disyuntiva entre el nombre del ganador oficial y el reconocimiento popular. El mexicano Bruno Aloi fue proclamado triunfador al cortar la única oreja de la noche ante el cuarto novillo, el más completo del serio encierro de Guadaira. Su actitud resolutiva, temple ante el viento y una estocada efectiva le valieron el premio. Sin embargo, desde los tendidos no faltaron protestas a la concesión y a la manera de lograrla, que algunos consideraron más efectista que profunda.
Frente a él, el peruano Pedro Luis se ganó el respeto y la ovación de la afición con una actuación entregada y muy torera. A pesar de sufrir un susto tremendo al recibir al sexto novillo de rodillas, se repuso y construyó una faena de muletazos hondos, ceñidos y con aroma clásico, que solo el mal manejo de la espada impidió que se coronara con oreja. Fue el torero que más convenció a los aficionados exigentes, aunque el jurado lo dejó sin premio.
El Mene, que tuvo una buena actuación ante el segundo, mostró gusto y personalidad, especialmente al natural y en doblones. La petición de oreja fue desatendida por la presidencia. En su segundo turno, con un novillo manso y descastado, apenas pudo mostrar nada. Pese a su esfuerzo, quedó en tercer plano ante el contraste entre la entrega de Pedro Luis y el triunfo numérico de Aloi.
El encierro de Guadaira fue duro y desigual. De seria presentación, algunos utreros parecían toros por cuajo y defensas.
Tras la proclamación oficial de Bruno Aloi como ganador (anunciada primero en redes y más tarde por megafonía), la empresa Plaza 1 optó por incluir a los tres novilleros en la próxima Feria de Otoño como reconocimiento a su esfuerzo. Una decisión que, aunque no zanja del todo la polémica, equilibra la balanza de méritos y visibilidad en una final que deja más debate que certezas.